LOS FLAVIOS: Vespasiano, hijo de un recaudador de impuestos, que alcanzó las dignidades militares por su propio mérito, fue un emperador burgués, trabajador y económico.
Reorganizó la hacienda que Nerón dilapidó con sus locuras, restableció la disciplina en los ejércitos y dominó las revueltas de los germanos y de los judíos. Depuró el senado y abrogó la << ley de la majestad >>, al amparo de la cual se habían dictado tantas proscripciones. Murió de muerte natural, burlándose de los honores divinos que se habían rendido a los emperadores difuntos. << Siento que llego a ser dios >>, dijo con soma (79).
Tito, su hijo, que terminó la campaña de Judea con la toma de Jerusalén, sólo reinó dos años, lo cual fue bastante para que la llamaran las delicias del genera humano. Se quejaba de haber perdido el día cuando no había hecho una buena acción. Durante su reinado fue cuando hubo la famosa erupción del Vesubio, cuyas cenizas sepultaron las ciudades de Herculano y Pompeya (79).
Domiciano, su hermano, que le sucedió, no fue menos prudente
durante los trece primeros años de su reinado; jamás fueron tan
dichosas la provincias. Después, el 93, llegó a ser como Nerón,
tirano cruel que cortó cabezas sin discernimiento, expulsó a los
filósofos de Roma, persiguió a los cristianos y murió asesinado
(96). Su propia mujer estaba metida en la conjuración.
|
|
LA HISTORIA Y SUS PROTAGONISTAS: GRECIA, ROMA Y LA EDAD MEDIA |
||